Olga Cervera es una de esas personas de este sector que tiene los áridos en la sangre. Más aún desde que tuvo que hacerse cargo casi de un día para otro de las empresas familiares Hormigones Grañén y Hormigones Fraga como gerente. Además, desde la última Asamblea General de ANEFA es miembro de nuestra Junta Directiva. Démosle la bienvenida y conozcamos un poco más a fondo tanto su visión del sector como la labor de  las empresas donde ejerce su labor.

 ¿Cuánto tiempo llevas involucrada en el mundo de los áridos?

En principio te diría que desde que tengo memoria ya que Hormigones Grañén fue fundada por mi padre y siempre era parte de nuestro día a día. En cuanto a lo estrictamente profesional todo comenzó hace trece años cuando comencé mi andadura en la firma donde actualmente desarrollo mi actividad profesional: Hormigones Grañén. Mi llegada estuvo precedida de circunstancias de fuerza mayor ya que lo hice para ocupar el puesto de mi padre, que había fallecido repentinamente. Él fue el fundador de la empresa. Previamente había trabajado en el sector de la construcción, en temas relacionados con la edificación, pero indirectamente, como no podía ser de otra forma, siempre he estado unida al sector, ya que mi padre trabajaba con mucha pasión y eso nos lo transmitía siempre a toda nuestra familia.

¿Cuáles son las principales vías de acción de vuestra empresa? ¿A qué desafíos te enfrentas en el día a día?

Desarrollamos nuestro trabajo principalmente en la provincia de Huesca. demás de los áridos, nos dedicamos a la obra civil, los asfaltos y la gestión de residuos.

Uno de los desafíos que se nos presenta en lo relativo a nuestra actividad es el alto coste del transporte, principalmente por la subida de los gasóleos, lo que nos hace buscar las materias primas más cercanas y trabajar eficientemente con la energía en las plantas de producción, para poder llegar al cliente a unos precios más competitivos. Otro desafío significativo es la competencia en el mercado. Es un sector altamente competitivo. Nos exige que estar al día de las normativas algo que, en el sector de los áridos, es un campo increíblemente amplio. Por otro lado, debemos cumplir con todos los requisitos legales para obtener los permisos necesarios antes de iniciar cualquier proyecto. Todo ello nos obliga a plantear y seguir una planificación lo más adecuada posible ya que los plazos para conseguir autorizaciones tardan años en solventarse.

¿Cuál es tu visión de presente y futuro del sector?

Según el informe estadístico del 2022 de ANEFA, el año pasado hubo una ralentización en el consumo de áridos, lastrado principalmente por la subida de los costes energéticos y la inestabilidad económica. Hay que añadir a esto la creciente preocupación por la sostenibilidad y la gestión responsable de los recursos naturales. En consecuencia, es probable que la industria se centre en prácticas más sostenibles y en la implantación de tecnologías más avanzadas para reducir el impacto ambiental y los costes de producción.

En los próximos años, es posible que haya una implementación de tecnologías de automatización y digitalización en la industria, lo que permitirá a las empresas mejorar la eficiencia y la seguridad en la producción y el transporte de materiales. También estamos viendo que la industria se enfrenta a regulaciones más estrictas en materia ambiental y de seguridad, lo que requerirá que las empresas adoptemos prácticas más responsables y sostenibles.

En resumen, el futuro del sector de los áridos probablemente se centrará en la adopción de tecnologías más avanzadas, prácticas más sostenibles y una mayor responsabilidad ambiental y de seguridad en la producción y el transporte de materiales.

¿Cuál crees que es valor que una asociación como ANEFA añade a las empresas del sector? ¿Por qué piensas es necesaria?

ANEFA ofrece a sus miembros una sólida e innovadora plataforma de colaboración, representación de sus intereses y asesoramiento técnico y legal. Además, fomenta en gran medida el desarrollo y la formación en el sector. La labor de ANEFA es muy necesaria debido a la complejidad y regulación del sector de los áridos, así como a los desafíos ambientales y de seguridad a los que nos enfrentamos.

ANEFA nos ayuda como asociados a comprender y cumplir con los requisitos regulatorios, establecer estándares para prácticas sostenibles y resolver problemas y desafíos importantes que pueden impactar en la industria. Además, nos representa de manera brillante y defiende los intereses del sector a nivel nacional e internacional.

En los 46 años de vida de la asociación ha conseguido ser una organización muy valorada y sus servicios son esenciales para las empresas que estamos en el sector.

ANEFA es un espacio de colaboración y desarrollo en el que las empresas compartimos los desafíos sobre el cambio climático, la transición energética o la digitalización.

Eres una de las nuevas incorporaciones a la Junta Directiva de ANEFA. ¿Cómo te planteas esta nueva responsabilidad?

La Junta Directiva de ANEFA desempeña un papel fundamental en la promoción del crecimiento y desarrollo sostenible de la industria, por tanto, formar parte de ella me supone un reto que afronto con mucha ilusión. La Junta defiende los intereses de la industria y en mi caso quiero visibilizar a las empresas familiares y productores pequeños.

La Junta Directiva es responsable de la planificación y ejecución de las actividades de la asociación. Por tanto, la labor de la Junta Directiva es clave para garantizar la sostenibilidad y el éxito de la industria de los áridos en España.

Estaremos, coordinados por nuestro nuevo presidente de ANEFA, Santiago Sánchez, siempre preparados para trabajar con los miembros de la asociación, defendiendo los intereses de la industria y fomentando el desarrollo profesional en el sector.

Además de tu labor diaria, ¿qué te gusta hacer fuera de la oficina? ¿Quieres compartir con nosotros alguna de tus aficiones?

Intento aprovechar al máximo el tiempo con mi familia y amigos. Nos escapamos frecuentemente al Pirineo, ya que vivimos muy cerca y es maravilloso. Disfrutamos en invierno con el esquí o en verano con las excursiones. Me gusta viajar, y siempre voy recogiendo piedras de los viajes, no sé por qué…