Tras la reunión de seguimiento de la Estrategia Minera de Andalucía 2020, celebrada la semana pasada, se presentó un Informe de seguimiento, que hace referencia a 2016, aunque también se mencionan avances del seguimiento de 2017 y los principales pasos que se están dando en 2018. Lo analizado hizo referencia a:

a)    Desde un punto de vista formal, este órgano tripartito (Equipo Dinamizador de la EMA) se asimila al órgano de concertación antes denominado Mesa de la Minería. Se reunirá al menos dos veces al año, con total flexibilidad para poder reunirse de forma expresa cuando haya algún tema de actualidad que así lo haga conveniente.

La próxima reunión será hacia el mes de noviembre, con carácter previo a la reunión del órgano encargado de evaluar la Estrategia, al que se elevará el seguimiento de los ejercicios 2016 y 2017.

b)    Respecto a los contenidos, la Dirección General expuso por ejes el estado en el que se encuentran las diferentes medidas que incluye la Estrategia Minera, conforme a la documentación que se acompaña.

Se hizo hincapié en la necesidad de revisar el cuadro de indicadores que la Estrategia definió en su momento para realizar el seguimiento (muchos muy lentos de obtener, que incluso aún no llegan a 2016), al objeto de incorporar nuevos indicadores, de carácter más coyuntural, que realmente puedan mejorar el seguimiento. La Dirección General, tras consulta con el Instituto Andaluz de Estadística (IECA), nos remitirá una propuesta al respecto, abierta a las aportaciones que se estimen convenientes, siempre teniendo en cuenta la facilidad de acceso a dichos indicadores a proponer: que sean operativos y ágiles para el seguimiento.

c)    Por nuestra parte, se insistió en la necesidad de mejorar en imagen social del sector, en la unidad de acción en la promoción del sector, y en la racionalidad normativa y necesaria agilización de las tramitaciones, tanto ante el servicio de minas (en las delegaciones), como ante otros departamentos de la administración autonómica, como medio ambiente, y ante otras administraciones territoriales.

d)    Desde la Dirección General se contestó en la idea de que sea el sector el encargado de liderar, desde la coordinación de los distintos sectores, la promoción de la imagen y su defensa ante los posibles ataques que reciba la actividad minera desde la sociedad en general o ciertos colectivos en particular, para lo que el sector tendría siempre el respaldo de la DGIEM.

A su vez, la Dirección General también manifestó sus propias dificultades (y solicito por su parte, la colaboración de los sectores) a la hora de hacer coincidir los esfuerzos que se realizan con las actuaciones que despliegan otros departamentos (en especial, medio ambiente), y que realmente llevan a verdaderas incoherencias en las actuaciones desarrolladas como Junta de Andalucía (unos impulsan al tiempo que otros frenan o penalizan).

e)    Desde la parte sindical, en la reunión se hicieron referencias expresas a la necesidad de mejoras en el ámbito de la calidad del empleo y en la prevención de riesgos. Así como a integrar a los trabajadores en las actuaciones que se dirijan a mejorar la imagen del sector.