(Javier Andrada Andrada, presidente de ANEFA)
Desde que conocí ANEFA, primero como miembro, luego como vocal de la Junta Directiva, posteriormente como vicepresidente y, finalmente, como presidente, he ido viendo cómo se ha ido desarrollando y adecuando a las circunstancias y necesidades del sector de los áridos, pero marcando siempre la diferencia por la calidad de sus actuaciones en todos los órdenes y por los logros conseguidos para todas las empresas del sector.
Como logros más destacados, ha impulsado numerosas modificaciones legislativas, como el Real Decreto de reclasificación de sustancias o el nuevo artículo 122 de la Ley de Minas; ha ubicado al sector como líder de la industria extractiva ante las administraciones y los políticos en todos los ámbitos territoriales (local, autonómico, nacional e internacional); ha liderado la defensa jurídica del sector con muchas y muy relevantes sentencias favorables; ha promulgado la introducción en las empresas del sector de criterios avanzados de gestión medioambiental, de seguridad y salud y de calidad; ha abierto el sector a la sociedad a través de una importante campaña de comunicación apoyada en actos como el Día de los Árboles y los Áridos; ha conformado el Congreso Nacional de Áridos como cita de referencia nacional e internacional y; ha creado escuela de cómo debe ser una organización empresarial sectorial, parca en recursos, pero muy activa, dinámica y generosa.
Prueba de ello es que, en la muy reciente encuesta de calidad de la Asociación, los empresarios hemos valorado la labor ANEFA en la defensa de los intereses del sector como sobresaliente, al igual que al conjunto de su actuación.
Nuestra Asociación nos ha acompañado en los momentos de expansión empresarial y se ajusta con nosotros, los empresarios, en los momentos de crisis.
Efectivamente, hoy en día, todas las empresas del sector estamos ajustándonos al máximo y, por lo tanto, desde la Junta Directiva hemos adoptado recientemente decisiones de recomposición de la estructura de ANEFA, difíciles por la calidad profesional y humana de las personas que nos dan servicio a todos, pero necesarias para hacer frente a los tiempos que nos está tocando vivir, con el objetivo de conservar lo esencial y asegurar el futuro y la capacidad de actuación en los próximos años. Con estas medidas, ANEFA habrá reducido su plantilla en un 62% desde el inicio de la crisis, actuando responsable y coherentemente con el escenario sectorial actual.
También se están poniendo en práctica las medidas para que los servicios y actividades esenciales de ANEFA se mantengan al nivel habitual de calidad que siempre demandamos los empresarios, aunque hemos de ser conscientes de las limitaciones que nos podremos encontrar eventualmente.
Volviendo sobre el título de este editorial, ANEFA es nuestra asociación y hemos de sentirnos orgullosos, pues nos ayuda, nos apoya y se esfuerza como todos nosotros por hacer frente a la crisis. Los empresarios hemos de corresponder con implicación y permanencia, pues es quien realmente nos defiende en todos los ámbitos y, sobre todo, es nuestro patrimonio sectorial que tenemos que conservar si queremos mantenernos en este nuestro sector.
